Columnista 

Johana Orozco Ortiz 

Quizás ustedes no me recuerden, pero eso no es lo importante. Dejé de escribir porque hubo un tiempo en el que las noticias me consumieron y una periodista, muy reconocida, uso sus influencias en redes para poner ojos no muy amables en mí. 

Pero por usted, señor presidente, vuelvo aquí. Regreso donde formé mucho de lo que me hizo periodista, pero, sobre todo, donde me enseñaron que la libertad de prensa se respeta sin importar la orilla política de donde venga. (Por si se le ha olvidado).

Nunca tuve reparo en decir que mi voto había sido por usted, pero, así mismo, dije que iba a seguirle los pasos en cada una de sus decisiones, intervenciones y todo lo que hiciera en el poder. Sí, me he guardado muchas opiniones sobre su gobierno, sin embargo, esto me genera incomodidad no solo como ciudadana, sino como periodista, porque no importa el candidato o los candidatos que apoyen mis colegas, ninguna de ellas es lo que usted dijo. Ninguna de ellas es una "muñeca de la mafia".  

Su argumento es:

Cuando hablo de periodistas del establecimiento, hablo precisamente de quienes no están al servicio de la ciudadanía sino de quienes están a sueldo de poderes oscuros, y su información depende del sueldo de quienes pagan

Señor presidente, ¿sabe cuánta estigmatización recibimos las mujeres periodistas de políticos como usted? En un país horriblemente machista, pero además, con índices alarmantes de periodistas asesinados, no es posible que salga con palabras irresponsables a dar un discurso de posicionamiento de una MUJER.

No me extraña que, ahora que está en esa posición, quiera decidir cuáles son las opiniones que se pueden y no se pueden dar, nada diferente a lo que hacía la derecha cuando tenía la presidencia.  No, señor Petro, no se nos ha olvidado que el periodismo es investigar el poder (como usted lo dijo), creo que más fácil es a usted a quien se le ha olvidado, no solo la libertad de prensa y de expresión, sino su deber como mandatario de asegurar que todos los periodistas puedan ejercer sin miedo a que los manden a callar:

No es la primera vez que Petro arremete contra los periodistas. En junio pasado incluso señaló a la FLIP de defender la calumnia. La Fundación ha advertido este lunes que solo entre 2023 y 2024 ha documentado 171 casos de agresiones contra mujeres periodistas, de las cuales 43 han sido amenazadas de muerte.

Hace algún tiempo dejé de escribir por miedo. Por miedo a que las amenazas se conviertan en realidad, ¿sabe cuál era la diferencia?, que el poder estaba en la derecha y yo confié en que usted haría algo, no mucho, pero al menos algo mejor.  Sin embargo, sus ataques a los periodistas no tienen nada que envidiarle a los de su orilla contraria. Si me equivoqué o no al votar por usted, es algo que ya no vale la pena analizar, pero sí vale la pena ser la periodista que cuestiona sin importar el candidato que sea, sin importar (incluso con mayor razón) si fue por quien voté.

No juegue al malinterpretado, hágase responsable de lo que dice y entienda que este país ya tiene suficiente como para que su presidente también salga a poner reflectores sobre profesionales que solo están haciendo lo que deben hacer. Si tiene pruebas de actuales periodistas que tengan nexos con la mafia, no lo diga en un discurso de posicionamiento, sino que remítase a la ley y dedíquese a cumplir el cargo que tiene con responsabilidad.  Salir a desestigmatizar a la prensa es fácil (para usted) , pero darles condiciones seguras parece estarse convirtiendo en algo imposible.